Una noche le pregunte si quería armar el árbol conmigo y fue corriendo a buscarlo en el armario. Me sorprendió ver como se acordaba que lo guardamos ahí. Cuando lo saque tenía que abrirle las ramitas y él estaba desesperado para que de una vez el árbol este de pie.
Después de eso los adornos, "acá, acá peoita" (pelotita), tenía tanta alegría que no paraba de mirarlo y ni hablar cuando enchufamos las luces.
Al otro día Sofía lo vio, ella no gatea pero cuando quiere se arrastra y fue enseguida a querer sacar los adornitos.
Me encantá la Navidad y todo sus preparativos. Estaba un poco triste porque esta iba a ser nuestra 3 Navidad sin pesebre... y bueno como no habiamos comprado nada decidí hacerlo. Mas adelante continuaré haciendo el resto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario